Cómo liderar con éxito equipos de teletrabajo

El teletrabajo conlleva un importante desafío en la gestión de equipos. Liderar a teletrabajador_s supone retos y dificultades asociadas a la comunicación, la administración del tiempo o el bienestar de l_s emplead_s. Conscientes de que muchos managers se enfrentan a esta situación, te damos algunas recomendaciones para liderar de forma efectiva trabajando en remoto. 

Tabla de contenidos:

Qué es el teletrabajo y cómo funciona

El teletrabajo o trabajo remoto es el trabajo que se realiza en un lugar alejado de la oficina o sede de una organización. Generalmente, este empleo a distancia se realiza desde el domicilio de cada profesional. 

Para que se pueda producir, es necesario un sistema de telecomunicación o red informática que lo permita. También es fundamental que la empresa disponga de canales y herramientas que faciliten el intercambio de información a través de reuniones virtuales, documentos compartidos, chats internos, etc. 

En la actualidad, muchas compañías se han visto obligadas a implementar el teletrabajo como medida de adaptación a la crisis sanitaria provocada por el coronavirus. Este hecho implica un proceso de adaptación tanto para la producción como para el liderazgo y gestión del personal.

Teletrabajo: ventajas e inconvenientes

Antes de pasar a los consejos de teletrabajo para responsables de equipo, vamos a ver las principales ventajas y desventajas del trabajo a distancia. 

Ventajas

• Conexión permanente entre profesionales. 
• Mayor autonomía personal. 
• Flexibilidad en el horario laboral. 
• Conciliación familiar, personal y laboral. 
• Disminución del estrés. 
• Reducción del absentismo laboral.

Inconvenientes

• Incertidumbre, al no saber qué está haciendo el resto del equipo. 
• Pérdida de información. 
• Pérdida de control de l_s emplead_s. 
• Aumento de las distracciones. 
• Dificultad para separar trabajo y tiempo personal. 
• Posible desvinculación emocional

Cómo liderar desde casa (spoiler alert: la confianza es clave)

Cuando se pasa de un trabajo presencial a un trabajo remoto, surgen algunas dudas. Por ejemplo: ¿Cómo podemos gestionar la responsabilidad?, ¿cómo verificar que el equipo está trabajando?, ¿cómo pueden l_s emplead_s mostrar que siguen comprometidos?, ¿es posible mantener la efectividad trabajando desde casa?

Ante esta incertidumbre, es habitual que suceda lo siguiente: Por una parte, l_s managers rebajan su nivel de control; por otra, l_s profesionales acaban trabajando más de lo habitual para demostrar su compromiso.

Pero ambas situaciones son evitables. La solución es, simplemente, la confianza. Si somos capaces como managers de construir una cultura de confianza, el equipo remoto logrará cumplir sus objetivos. 

Las 5 cualidades de buen management

A continuación veremos 5 pasos para generar un ambiente de confianza en el trabajo remoto. Como hemos visto anteriormente, este sentimiento es la base de las relaciones laborales entre managers y trabajador_s, especialmente en un contexto de trabajo a distancia. 

1. Transparencia 

La transparencia siempre es un valor a tener en cuenta, y más aún en el trabajo remoto. Con la barrera del distanciamiento físico es mucho más fácil retener accidentalmente información. En ese sentido, deberemos asegurarnos de comunicar todas las cuestiones relevantes a las personas del equipo, evitando sorpresas indeseadas. 

Es habitual habilitar chats para la comunicación de los equipos remotos (en homuork utilizamos Slack). Para Michael Pryor, cofundador de Trello, lo más recomendable es utilizar estas herramientas de forma colectiva (“para enviar mensajes privados ya tenemos el correo electrónico”). Según Pryor, así evitamos que se pierda información y nadie siente que las cosas están sucediendo a puerta cerrada. De esta forma, contribuimos a construir esa cultura de confianza que estamos buscando.

2. Conocimiento del equipo 

Confiamos más en las personas que conocemos. Por ello, es recomendable invertir cierto tiempo en conocer al equipo que trabaja con nosotr_s. Dedicar espacio a la socialización.

En homuork, hemos habilitado canales para el ocio en Slack. El tiempo en ellos no debe verse como una pérdida de tiempo: es una forma de establecer contacto personal con el equipo, que imprime y mejora la confianza a la hora de trabajar conjuntamente. 
 
En palabras de Sarah Park, presidenta de Meet Edgar, “cuanto más tiempo pases teniendo una conversación tonta por Slack, más fácil será entrar en una videollamada por primera vez y sumergirte en el trabajo”. 

3. Objetivos definidos

Como managers, debemos dejar claras nuestras expectativas: ¿Qué queremos conseguir?, ¿cómo lo haremos?, ¿qué esperamos de cada miembro del equipo? De esta forma, lograremos que todas las personas estén alineadas en el alcance de los objetivos marcados. 

También es importante que se establezca el sistema de comunicación de avances en los proyectos. Este puede ser un resumen diario, una reunión semanal, un documento compartido que debe rellenarse, etc. 

Tener claras las expectativas y los objetivos laborales significa poder dirigir nuestra energía. También es un factor motivador para que l_s emplead_s comuniquen al equipo cualquier dificultad, elemento obstructor o bloqueo que pueda aparecer durante la actividad profesional.

4. Centrarse en el resultado

El trabajo a distancia implica que no podemos conocer el tiempo que nuestro equipo pasa sentado en la silla, delante del ordenador. Como es lógico, por tanto, no podemos el control horario como indicador. 

Durante la jornada laboral, hay que centrarse en el resultado final, es decir, trabajar por proyectos o por objetivos. 

Cuando hablamos de la necesidad de crear un ambiente de confianza en el trabajo remoto, no estamos hablando de confiar en que las personas trabajan de nueve a seis. Confiamos en que lograrán lo que acordamos que deberían conseguir.

Natalie Nagele, cofundadora de Wildbit, declara: “Para mí, el valor del trabajo remoto es esa confianza y esa capacidad de empoderar a cada persona para administrar su tiempo, sus días y sus responsabilidades en torno a un producto. Nos hacemos una promesa mutuamente: ‘voy a cumplir con esto, y si no puedo entregarlo, voy a comunicar por qué’.”

5. Estar presente 

Aunque no nos pueda ver físicamente, nuestro equipo tiene que saber que estamos ahí. La buena noticia es que la digitalización nos lo pone fácil. 

Es importante que vayamos dando feedback a las acciones que realizan l_s trabajador_s, para evitar la sensación de pérdida o desamparo. Una buena manera de hacerlo es fijando reuniones periódicas de seguimiento. En estas, podemos informar del estado global del proyecto, actualizar los documentos con los que trabajamos, proponer cambios, corregir posibles errores…  

Utilizar la nube para compartir, editar y comentar el trabajo a tiempo real también es muy recomendable. Uno de los beneficios de trabajar en remoto es que casi todas las herramientas que utilizamos, como Dropbox o Google Drive, permiten ver en qué está trabajando el equipo y los cambios que ha realizado cada persona. Aprovechemos estas funciones para incluir comentarios, hacer anotaciones o consultar dudas. 

Cómo formar a tu equipo en teletrabajo

Como ves, ejercer un buen liderazgo en estos tiempos exige que revisemos ciertos aspectos de nuestro día a día. Se trata de un proceso de adaptación que todos estamos viviendo. Para ayudar a tus equipos en esta transición, te ofrecemos el curso Claves para el teletrabajo efectivo.

En este curso online, tus emplead_s se formarán en habilidades digitales, aprenderán a realizar reuniones virtuales de forma eficaz, y obtendrán recursos para optimizar la gestión del tiempo (cómo priorizar tareas, herramientas online para el teletrabajo, decálogos de buenas prácticas, etc.).

Fuentes:

• https://zapier.com/blog/build-trust-remote-work/